Me gusta ver pasar el tren, y también jugar con el río. Saludar con una sonrisa a la arena, al fin y al cabo somos familia. No está mal vivir en una pecera, aunque el buceador sea de pocas palabras. Es gratificante, reposar en la maceta, y, ver crecer a la planta. Una vez, comuniqué a los pueblos siendo calzada Otra los separé siendo muralla. Brillante objeto de admiración en fiestas, y medio de paseo en largas aceras. Protegiendo puertos del mar y su tempestad simbología de culturas, legado al azaar. En la esbeltez de puente, palacio ó castillo. También gusto, de dar cobijo humilde, y sencillo. ¿Pero, qué es la vida? sin amigos como la hiedra, sentir que alguien me quiera aunque, tan sólo, sea una piedra.
Diseñador de estímulos.